El cálculo costo- beneficio es una herramienta que mide la relación que existe entre los costos y los beneficios asociados a cualquier proyecto de inversión; ya sea un producto, servicio, o una empresa completa. Este cálculo permite conocer la rentabilidad de la inversión.
La relación costo- beneficio también se conoce como índice neto de rentabilidad y se obtiene al dividir el valor de los beneficios netos (VAI) entre el valor de los costos totales de inversión (VAC).
Además de conocer la rentabilidad de un negocio, el análisis costo- beneficio permite saber si la inversión es viable y compararla con otras inversiones.
Para calcular la relación costo- beneficio, existe la fórmula:
B/C= VAI / VAC
En donde:
Una inversión se considera rentable cuando los beneficios son mayores que los costos de inversión. Por otra parte, no es rentable cuando los beneficios son iguales o menores a los costos de inversión.
Para los abrasivos, calcular la relación costo- beneficio requiere de la consideración de diversos factores, ya que el beneficio no es un valor neto que se produzca al emplear abrasivos; es decir, que los abrasivos no generan un ingreso por sí solos.
Los abrasivos son herramientas que se emplean dentro de una cadena de producción en tareas específicas. Por este motivo no se puede calcular directamente el beneficio. Para ello, es necesario considerar los beneficios que aporta el abrasivo a la producción.
Por ejemplo, el tiempo y recursos necesarios para reponer un abrasivo desgastado por uno nuevo; la vida útil de un abrasivo o el tiempo que se requiere para realizar una tarea de rectificado, corte, desbaste, etc.
Los beneficios se obtienen al calcular cuántas veces puede realizar una tarea, la velocidad con la que la realiza y el tiempo que estará funcionando antes de quedar inservible y compararlos con el desempeño de otros abrasivos.
Es decir, el beneficio de un abrasivo es igual a los ahorros de tiempo, materiales y trabajo humano; así como las mejoras en la productividad que aporta a una cadena de producción.
La relación costo-beneficio no ofrece soluciones por sí misma. Esta es una herramienta que debes utilizar para determinar las medidas que cubran las necesidades de tu negocio y aumenten la rentabilidad de este. Toma en cuenta los siguientes puntos:
Recuerda que una inversión menor en abrasivos, no significa que obtendrás mayores beneficios. De igual manera, los abrasivos de mayor precio, pueden aportar beneficios más grandes que otros de menor calidad.
Un abrasivo de gran calidad brindará grandes beneficios, por lo que es indispensable darle mayor peso a esta característica. Si bien el precio debe ser secundario, no es menos importante para tus finanzas.
Realiza una comparación entre las diferentes opciones y realiza una negociación con tu proveedor para obtener el precio más bajo por los abrasivos de gran calidad. Busca acuerdos que ter permitan obtener mayores beneficios como la compra en grandes volúmenes o contratos de abastecimiento a largo plazo.
GRAFF te ofrece abrasivos de excelente calidad a precios competitivos. Además, gracias a la atención que brindamos y nuestro compromiso por cumplir los tiempos de entrega y mejorar el rendimiento de los materiales, obtendrás el mejor índice costo- beneficio que puedas encontrar.