Los refrigerantes son una herramienta de suma relevancia para el trabajo con abrasivos. Su uso nos permite evitar ciertos efectos negativos y optimizar los trabajos. Sin embargo, el refrigerante, como otros productos químicos, debe tener una correcta manipulación para evitar riesgos en los trabajadores.
Algunos de los principales proósitos del refrigerante en el rectificado son:
Antes de ir más allá, debemos aclarar algunas ideas y conceptos que manejaremos, de los cuales muy probablemente el más importante sea el proceso de rectificado, que consiste en la acción del trabajo en sí misma, no en sus elementos que permiten llevarla a cabo.
Esto es importante porque la función principal del refrigerante durante el rectificado es enfriar este proceso. Sin embargo, no es lo único que tiene que hacer. Por otro lado, el refrigerante también debe enfriar el abrasivo y colaborar para que los lubricantes en él funcionen.
El refrigerante también es de ayuda para mantener el área limpia de virutas, tanto en la máquina como en la pieza trabajada.
Todo lo anterior son elementos que se presentan de forma general en el proceso y el abrasivo. Dicho esto, es hora de revisar uno a uno, cuáles son los efectos del refrigerante en el proceso de rectificado de abrasivos.
La velocidad de las ruedas es un elemento importante para poder realizar un buen trabajo sobre la pieza en cuestión. Sin embargo, el exceso de calor nos podría orillar a realizar una reducción de esta velocidad.
Es en este momento en el que el refrigerante entra en acción, para mantener el rendimiento, sin riesgos de que el proceso o el abrasivo se calienten demasiado.
Este punto es sumamente relevante pues es el efecto que el refrigerante tiene en el resultado o en la pieza que pasó por el proceso de rectificado. El calor puede llegar a dañar las piezas que rectificamos, incluso puede provocar quemaduras.
Sin embargo, el refrigerante permite no solamente minimizar este tipo de daños, sino también ayudar a que el trabajo se realice más eficientemente, incrementando la cantidad de material removido durante el proceso de rectificado.
Otro efecto positivo del refrigerante es que permite reducir la frecuencia con la cual aplicamos el rectificado y esto genera que la carga del material de trabajo sea menor también.
Como consecuencia del punto anterior, el desgaste sobre el grano del abrasivo es menor, lo que amplía la vida útil de nuestras herramientas y, al mismo tiempo, nos permite tener una mayor eficiencia en nuestros talleres.
Cuando hacemos uso de los abrasivos, el aire puede llegar a ser una molestia o, incluso, un problema. Por ello, el refrigerante reduce el aire que se atrapa en el proceso, por lo que la formación de espuma o la generación de vapor dejan de presentarse en niveles problemáticos.
Algo similar ocurre con el aire que rodea el abrasivo, pues si el refrigerante se dirige como debe ser, este aire, que es una barrera en la rueda, se elimina.
Trabajar con refrigerantes, tal como con abrasivos, también tiene puntos de riesgo a tener presentes, en especial cuando el refrigerante ya se ha degradado y debe ser reemplazado. Por esa razón, queremos nombrar brevemente algunos efectos en este sentido, para que se les preste la debida atención.
Es importante destacar la importancia del refrigerante, pues sus efectos positivos pueden optimizar y mejorar todo el trabajo realizado en el rectificado.
Sin embargo, es importante capacitarnos correctamente y acercarnos a los especialistas en el tema, con la finalidad de trabajar de forma más segura y sin problemas en las piezas que trabajamos.